La voz del pueblo tiene poder
- Punto Seguido UPC
- 28 nov 2020
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Actualizado: 29 nov 2020
Los canales de televisión del país decidieron mirar hacia otro lado durante las últimas protestas. Esto generó indignación en la población ante una indiferencia muy dramática. Las plataformas periodísticas independientes se convirtieron en la única salida.
Escriben: Kristell Costilla, Kimberly Chambergo, Almudena Galarza y Camilia Valdivia

Durante la jornada del pasado 14 de noviembre quedó en evidencia la desconexión entre los medios televisivos del país debido a cómo decidieron construir su propia agenda en base a sus intereses. Incluso la voz del pueblo se vio opacada y subestimada ante los reclamos y las necesidades de lo que acontecía en ese entonces. Sin embargo, ante un panorama más digital, la necesidad de estar informados y ser escuchados se suplió con un periodismo ciudadano en que el empleo de las redes sociales fue esencial durante la segunda marcha nacional, ya que los propios usuario de estas plataformas cumplieron el papel de prosumidores, quienes tomaron la acción de registrar o compartir información cuando los canales de televisión se hicieron de la vista gorda.
Incluso durante la última crisis política que paralizó al país, la libertad de expresión se vio amenazada. Las renuncias y una denuncia pública de Renzo Mazzei, gerente de prensa del Instituto Nacional de Radio y Televisión del Perú alertaron de un acto de censura por parte del gobierno de Manuel Merino. Sumado a esto, la actuación de los medios nacionales mostraban una situación lejana a la realidad que reflejaban los ciudadanos en sus redes sociales. Ante esta falta de objetividad periodística la frase “la prensa minimiza, el pueblo amplifica” significó que los peruanos empiecen a cubrir el rol de la prensa.
Redes que facilitan la libertad
Para analizar un poco más sobre este tema hablamos con la periodista de El Comercio Francesca García. Ella nos mencionó que el flujo de los datos en las redes sociales es horizontal y valioso. Sin embargo resalta la diferencia que hay entre la información que circula en estas plataformas y la noticia. Ello debido a que el contraste entre una y otra es que los periodistas tienen el deber de cotejar y corroborar la información antes de ser publicada.
A esto se le suma el tema de las críticas por no difundir una noticia relevante de manera inmediata. “Las críticas deben ser interpretadas por estos medios y periodistas para comprometerse con la búsqueda de la verdad que es lo que todos buscamos. Para eso somos periodistas y no para comprometernos con grupos económicos o políticos. Nuestro trabajo es buscar la verdad”, menciona.
Las redes sociales y los celulares son herramientas que facilitan la propagación de la información de manera instantánea. Instrumentos que además facilitan la libertad de expresión de los ciudadanos y de comunicadores. Es por ello que ante la ausencia de una reacción rápida de la prensa, los usuarios tienden a criticar a los periodistas al no difundir de una manera rápida y no escuchar a la población. Tal como Francesca García menciona, esta situación sirve para que la prensa recuerde el verdadero objetivo periodístico que es la labor social.
Vemos que el derecho a expresarse se ha vuelto fundamental en la Generación del Bicentenario como se ha podido ver. Es por eso que algunos jóvenes peruanos han optado por crear plataformas en Instagram, Facebook y TouTube debido a que publican la información sin ningún interés de por medio. La independencia de estos, y el no tener una empresa detrás que los regule, permite que su labor tenga mayores libertades en estas plataformas.
Prensa del Bicentenario
A causa de la falta de libertad de expresión y la autocensura, en los últimos años han aparecido proyectos periodísticos independientes. Diversos medios de comunicación tienen un protocolo interno que de una u otra manera puede llevar al silencio de sus trabajadores.
“La libertad de expresión es un derecho que tenemos todos pero un comentario en redes sociales puede ser interpretado como una decisión institucional del medio en el que trabajas”, afirma la periodista García. Y es que en este panorama crítico, los medios tradicionales permanecieron en un status quo del que sólo salieron tras la confirmación del primer fallecido en la segunda marcha nacional.
Ante el disgusto de los usuarios, los periodistas vieron la oportunidad de lanzar medios digitales independientes. Plataformas como Dilo Fuerte o Punto y Coma se volvieron tendencia, pues usuarios de estas redes empezaron a difundir estos nuevos medios dándoles su apoyo. Incluso páginas que se dedicaban a la farándula o memes, dejaron de lado su contenido usual para dar espacio a los acontecimientos que estaban sucediendo aquel sábado 14 de noviembre.
Los noticieros tradicionales de los canales como Latina, América televisión o ATV no le daban el espacio necesario a estos sucesos optando por su programación habitual. Un claro ejemplo de ello fue cuando Latina transmitía su noticiero de noche pero a las 8 de la noche dio pase al programa cómico El Wasap de JB. Mientras, los medios independientes antes mencionados tuvieron cobertura total y más cercana a los ciudadanos.
La prensa televisiva peruana y las marchas
¿Cómo la prensa televisiva informó sobre la segunda marcha nacional en contra del gobierno de Manuel Merino a diferencia de los medios internacionales? Entérate aquí:
Periodistas: ética, ironía e información sesgada
En medio de la crisis política, muchos periodistas salieron a opinar sobre el tema. Algunos tuvieron apoyo de los peruanos mientras que otros fueron duramente criticados. Incluso, fue tanta la indignación de algunas personas ante ciertos comentarios desatinados que se movilizaron a protestar fuera de los canales de televisión. Hasta los hogares de los propios periodistas.
El caso del periodista de Willax, Beto Ortiz, destacó por sus polémicos comentarios, donde cuestionó la validez de la marcha ciudadana. “Anoche celebraban que había un muerto, están como loquitos para que aparezca un cadáver”, comentó en su programa Beto a Saber. Y no conforme con eso, siguió ironizando sobre la frustración de los peruanos, fallecimientos y las protestas. Por otro lado el periodista Marco Sifuentes, con su programa independiente La Encerrona, recibió respaldo del público quienes le agradecían por informar de manera objetiva. Además por el contenido de calidad que ofrecía.
El caso de la conductora y periodista del programa cultural Costumbres Sonaly Tuesta fue muy impactante. Ella dio a conocer el intento de censura del entonces gobierno del presidente Manuel Merino, por lo que renunció al canal en donde trabajó durante 20 años. “Basé mi trabajo en mis propios objetivos y compromisos, al margen de los gobiernos de turno y con la esencia del principio: hablar del Perú a través de la gente. Hoy, la situación es distinta: Un gobierno ilegítimo, sin equilibrio de poderes, con la libertad de expresión respondida con el uso desproporcionado de la fuerza, con interferencias en la línea periodística del canal estatal para sacar de pantalla esas voces que no se quieren escuchar. Se ha quebrado la democracia”, mencionó en un comunicado oficial.
De esa manera se pudo apreciar la ética que cada periodista desempeñó en esta etapa difusa. Situación que además volvió más críticos y exigentes a los ciudadanos quienes optaron por indignarse y tomar acciones en contra del mal ejercicio periodístico. Por ejemplo, exigiendo a empresas como Universal, Mall del Sur y Gloria que le quitaran los auspicios. Medidas que serían más perjudiciales que apagar la televisión y no contribuir con el rating.
Hoy, los jóvenes tienen una mirada más crítica ante el papel de los medios. Además, los que salieron a marchas e informaron a través de sus redes sociales, vieron la desinformación por parte del mass media. Incluso, información mal intencionada de ciertos periodistas. Algo que generó indignación en la juventud rechazando aún más a estos medios, ya que ellos buscan una plataforma en donde prime la libertad de expresión informando de manera transparente, consciente y que no velen por sus propios intereses.
Mientras tanto, te recomendamos 5 medios independientes que estuvieron al día con la cobertura de nuestra última coyuntura política.
Wayka es un medio de comunicación comprometido con la democracia participativa, la defensa de los derechos humanos y el bien común. Independientes de la élite económica y la política, su meta consiste en informar la realidad a todos los peruanos a diferencia de la concentración de medios privados.

Útero es un perfil de información que traduce el “periodismo formal” al lenguaje de los jóvenes. Un tipo de periodismo en resumen que empezó como blog y luego se fue adaptando a las redes sociales.
Marco Sifuentes, periodista peruano informa a través de un podcast llamado “La Encerrona”, a través de la plataforma de Instagram. Este programa en podcast sale de lunes a viernes y toca temas sobre los aconteceres políticos, sociales y económicos del país.
Ojo público es un medio informativo nativo digital dirigido para jóvenes con mayor énfasis en la región latinoamericana. Su misión principal es la realización de hacer periodismo de investigación de calidad.
Punto y Coma es un perfil de Instagram que se creó hace unas semanas a raíz de la crisis política que atravesaba el Perú. Es una página que hace periodismo juvenil, narrando los hechos de las últimas semanas.
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